No hagas al viento participe
de tus lagrimas.
¡Quizás llueva!
No hagas al mar participe
de tus gritos.
¡Quizás se vuelva agreste!
No hagas al corazón participe
de tu ceguera.
¡Quizás quede ciego y herido!
Y no vuelva a entrar
la luz colorida que tus
ojos perciben cuando sonríes.
Sin miedos abre los ojos,
si de algo temes, ataca
con la sonrisa, defiéndete,
y aléjate a destiempos sin
buscar venganzas.
¡No huyas,
eres libre!
Solo recorre otros senderos,
queda mucho mundo,
muchos caminos que esperan
tus pasos para obsequiarte
con brisas, con mares, con flores,
con una mano que se abre para
guiarte hacia tus deseos
hacia tus sueños.
¡Abre los ojos!
¡Quizás se vuelva agreste!
No hagas al corazón participe
de tu ceguera.
¡Quizás quede ciego y herido!
Y no vuelva a entrar
la luz colorida que tus
ojos perciben cuando sonríes.
Sin miedos abre los ojos,
si de algo temes, ataca
con la sonrisa, defiéndete,
y aléjate a destiempos sin
buscar venganzas.
¡No huyas,
eres libre!
Solo recorre otros senderos,
queda mucho mundo,
muchos caminos que esperan
tus pasos para obsequiarte
con brisas, con mares, con flores,
con una mano que se abre para
guiarte hacia tus deseos
hacia tus sueños.
¡Abre los ojos!