Tu eres desierto yo soy rio con cauce

tus labios no tenían sed de mi

sediento estaba yo por ti

pasear por tu mirada

moldear tu cuerpo con el mio

y al abrazarnos hacer una figura bonita de barro

y nunca de fango pero la tormenta

en nuestros corazones arraso con todo

y todo fue a parar al mar de la desdicha

del tiempo perdido cronometrando el amor

amor que se marcho de luto y tiznaron 

nuestras ganas, yo por ti, tu por mi

y la sal secando las heridas

de dos incomprendidos

que desearon amarse y terminaron

odiando ese tiempo perdido.

cuando el amor se marchita

no hay tallo donde nazca otra flor.